Bridgestone Boletín Técnico
Número 25, Año 2010
El uso del nitrógeno en las llantas en lugar del aire se ha ido convirtiendo en una tendencia popular. El nitrógeno es el principal gas que forma el aire que respiramos:
1% es vapor de agua y otros gases.
21% es oxígeno
78% es nitrógeno, el gas con las moléculas más grandes, seco y no inflamable.
Por su gran tamaño, las moléculas de nitrógeno son las menos permeables y permanecen por más tiempo dentro de las llantas.
Los tres principales beneficios de utilizar nitrógeno son:
Incrementa la eficiencia del combustible: al mantener mejor la presión de inflado recomendada por el fabricante, la llanta mantiene una “huella” de contacto con la carretera óptima. Esto reduce la resistencia al rodado y maximiza entonces el uso del combustible.
Aumenta la vida útil de la llanta: Cuando el oxígeno entra en contacto con otros materiales causa oxidación. La oxidación puede hacer que el hule se vuelva quebradizo y que pierda su resistencia. Adicionalmente, a altas temperaturas y presiones, el oxígeno reacciona y daña el acero de la carcasa y de las bandas estabilizadoras; el nitrógeno es neutro y no reacciona.
Aumenta la seguridad: La baja presión de inflado es la causa del 90% de los estallidos de llanta durante su uso. El nitrógeno provee una presión más constante y reduce la probabilidad de daños.
¿Por qué pierden presión las llantas?
El aire pasa a través del hule. Las llantas de camión pueden perder 2 psi por mes como resultado del aire que escapa a través de sus paredes. Cuando el oxígeno pasa por las cuerdas de acero, causa su oxidación.
¿Cómo es que el nitrógeno ayuda?
Aunque ambos, el nitrógeno y el oxígeno, pueden permear el hule, el nitrógeno lo hace mucho más lentamente. Puede tomar hasta 6 meses para perder 2 psi con nitrógeno, comparado con sólo 1 mes usando aire.
El nitrógeno es mucho menos reactivo; no causa herrumbre o corrosión en el acero o el aluminio, así como tampoco degrada el hule.
¿Cómo se puede obtener el nitrógeno?
Algunas personas usan cilindros de alta presión o grandes contenedores de nitrógeno líquido como su fuente, pero muchas compañías ofrecen ahora máquinas que separan el nitrógeno del aire.
Estas máquinas pueden producir nitrógeno puro en un 95% o más, tomándolo de una fuente inagotable que es el aire que nos rodea.
¿Se debe hacer algo especial para inflar las llantas?
No realmente. Si se toma una llanta de camión que acaba de ser ensamblada, e inflada con un 95% de nitrógeno, ésta va a terminar aproximadamente con un 93% de nitrógeno. Eso es suficiente para hacer el trabajo.
¿Qué hacer cuando se está en carretera?
Si necesita aumentar la presión a las llantas, la pequeña cantidad de aire que agregue va a tener muy poco efecto. Si usted tiene capacidad de inflado con nitrógeno en el predio, cuando el camión llegue, puede dejar desinflar las llantas para luego reinflarlas con nitrógeno.
¿Es rentable hacer el cambio a inflado con nitrógeno?
Eso va a depender de las circunstancias particulares. Algunas pruebas han mostrado aumentos de hasta el 26% en la vida útil de las llantas, menor envejecimiento del hule y de la corrosión de las cuerdas de acero, también pueden aumentar la rencauchabilidad de los cascos, lo que reduce también el costo por kilómetro.
No hay nada mejor que pueda hacer que mantener la presión de inflado adecuada en sus llantas todo el tiempo.